viernes, 10 de febrero de 2012

URUEÑA. VILLA DEL LIBRO

Hacía muchos años que no volvía a Urueña. Creo que desde mis años universitarios. Casi nada. Sin embargo, no hace mucho, tuve el placer de que mi amigo José Luis López me invitara a participar como rapsoda en uno de sus libros (porque son unos cuantos los que ha escrito ¿verdad José Luis?). Un honor para mí, sinceramente.
Y un honor por partida doble, por un lado, porque José Luis me dió la oportunidad de declamar algunos de sus preciosos poemas y, por otro lado, porque disfruté del placer de recorrer, en compañia de buenos amigos, Urueña, la Villa del Libro. Y todos sabemos que no hay mayor placer en esta vida que disfrutar de una buena compañia.


Degustar un exquisito queso de la tierra y refrescar el paladar con un verdejo fresquito mientras compartes tertulia con gentes recias y, sobre todo, honestas no es algo frecuente hoy en día.


Recorrer la villa, despacio, asomándose a esos balcones naturales que relajan la mirada y perderte en el mar de Castilla, ora verde, ora amarillo, ora ocre, pero siempre hermoso, cambiante, envolvente.  ¡Que no tenemos mar en Castilla! ¿y qué falta nos hace cuando disponemos de este océno?

Subir a la muralla y, desde allí, con el viento azotándote la cara, otear el horizonte y contar pueblos, carreteras, pinares, campos, granjas, caminos ... Dejar que el viento
susurre en tus oídos y traiga pasiones, añoranzas, aromas, leyendas de gentes de castilla, recias, leales, luchadoras.


Descubrir palomares vacíos que se mantienen en pie solemnes y cargados de historia, en medio de un campo verde u ocre o amarillo. Campo, al fin y al cabo. Campo que alimenta pasiones, amores, rencillas y desengaños.
Urueña, libro abierto que te deja leer entre sus piedras, entre sus hombres. Urueña, Villa del Libro que se muestra fácil, accesible, gustosa, melosa, cual mujer fácil que deja que la toques, se escabulle, la sueltas y deseas volver a cogerla y retenerla.
Urueña, para no olvidarla. Urueña, para recorrerla. Urueña, para volver a ella.








No hay comentarios:

Publicar un comentario